Omara Portuondo

Omara Portuondo

Corría el año 1930 cuando el 29 de octubre vio la luz en La Habana quien con el devenir de los años se convertiría en una rutilante estrella de la música cubana, Omara Portuondo Peláez. Con apenas 17 años inicia su camino artístico como integrante del grupo Loquibambia, junto a músicos de la talla de Frank Emilio y José Antonio Méndez. Tres años más tarde, en 1950, integra el famoso cuerpo de baile del cabaret Tropicana y en el conjunto del coreógrafo Alberto Alonso.

Su carrera continúa en ascenso y en 1951 sustituye a Elena Burke y pasa al cuarteto del pianista y compositor Orlando de la Rosa, junto a músicos de la talla de Aurelio Reinoso, Roberto Barceló y Adalberto del Río, con quienes deslumbra al público en escenarios de Nueva York, Filadelfia, Cincinnati, Nevada, así como en Canadá. De aquella etapa, cuando hacía la segunda voz, quedan para la historia las favorables críticas de afamados especialistas de la época.

A partir de ese momento va labrando una trayectoria ascendente, maravillando al público en escenarios diversos y en las emisoras Mil Diez, CMQ y Radio Progreso. En Polonia, como representante de la firma discográfica cubana Areíto, se lanza como solista en la arena internacional.  Al mismo tiempo su talento alcanzó dimensiones fantásticas con el célebre cuarteto Las D’Aida, con las que  trabajó en los cabarets La Campana, Tropicana, Sans-Souci, Montmartre, Club 21, Parisién del Hotel Nacional; al tiempo que realizaron giras por Venezuela, México (actuaron en el cabaret Afro), Puerto Rico, Estados Unidos (se presentaron en el hotel Fontainebleau, de Miami), y en esa misma ciudad como parte del show del cabaret Tropicana, en el programa de Steve Allen.

Su participación en giras y festivales la llevan a los más diversos países de todos los continentes, donde cosecha lauros que acrecientan su fama. En 1996 se vincula al proyecto Buena Vista Social Club, el que le lanza nuevamente a los más elevados planos internacionales y multiplica su actividad discográfica con sellos cubanos, españoles y británicos.

A fines del 2009 es premiada con el Grammy Latino por el Mejor Álbum Tropical Contemporáneo con el disco Gracias, un compendio de lo mejor de la música tradicional, boleros y jazz. Ese mismo año comienza la grabación de la versión en español de uno de los personajes de una afamada película de Disney. La vida de esta importante intérprete de la música cubana fue llevada al celuloide por el cineasta Fernando Pérez en el documental Omara.

En el año 2006 fue reconocida con el Premio Nacional de Música. De esta manera La novia del feeling, como la tildó el locutor Manolo Ortega, recibía el reconocimiento de un pueblo que se ve a si mismo reflejado en su voz y su alegría.