Marta Valdés

Marta Valdés

Pudo estar entre las compositoras más prolíficas de Cuba, sin embargo escogió no dejarse acorralar por el bolero. A los veinte años ya había escrito “Y con tus palabras” una letra de rara fiereza.

La cubana Marta Valdés  perdura en los amantes de la buena música como gran compositora e intérprete de valía, enorme y cubana.

De a adolescente Marta Valdés escuchaba las canciones de Vicente Garrido y María Grever interpretadas por Bola de Nieve. Se detenía en las joyas del filin y aunque no lograba entender del todo, sabía  que algo sucedía con la música.

La muchachita de Miramar, de colegio de monjas, estudiante de filosofía y letras, de pronto se puso a componer boleros sin saber una sola nota. Por una santa casualidad le presentaron a la vez a Frank Domínguez, a Elena Burke y a Piloto y Vera.

Piloto empezó a transcribir sus cosas, le enseñó a escuchar jazz y la visitaba tantas veces como a la novia. Así Marta Valdés empezó a ser conocida en el mundo de la música.

Un día le pidieron un bolero para Pacho Alonso, entonces un muchacho, maestro  en Santiago de Cuba. Pero otros grabaron la pieza antes que él: Miguel de Gonzalo, Orlando Vallejo, Bola de Nieve. “Tú no sospechas”, era una canción tan grande que todos la querían.

En diciembre de 1958 seleccionaron a Marta Valdés “compositora del año”. Eran tiempos de gran fecundidad musical. Luego el bolero perdió terreno.

Fue alumna de Alejo Carpentier en un Seminario de música, entró en Teatro Estudio a hacer música.  Descubrió que en la canción también podía entrar la luz de la ciudad, los olores, los ambientes y en el 66 compuso “Yo me quedo”, un punto de giro en su obra. Dos años después nació “Llora” una canción que nadie aplaudió en su estreno aunque lo hizo Elena Burke. Hoy es un clásico de nuestra música, esa que tiene a Marta Valdés como una voz única.

Marta Valdés se considera una mujer romántica, no puede renegar de las cosas que ha hecho sinceramente, sobre todo la música. En algún tiempo, apenas se grabaron sus canciones. La gente pensaba que la compositora se había ido del país o había muerto, pero estaba viva y para demostrarlo creaba.

En 1978 ganó el primer concurso de música cubana “Adolfo Guzmán”. Un año después el evento presentó una gala con su obra. Empezó a redescubrirse que nuestra música poseía una joya del quilate de Marta Valdés. Intérpretes históricos y jóvenes acudían a un repertorio de inquietante riqueza. Reaparecieron en programas de radio y televisión. Voces populares interpretaban sus obras.

Por entonces nació la idea de un disco con la música de Marta Valdés y reúne a Elena, Frank Emilio, Gonzalito Rubalcaba, Miriam Ramos, Alina Sánchez, Argelia Fragoso, Miguelito Cuní, Bola de Nieve y Pablo Milanés. El gran público también redescubrió a esa mujer de voz personal a la que se le ocurrió en una guagua su primer bolero.

A Marta Valdés la vida le ha alcanzado para comprender que su música no es tan difícil. Ha tenido la alegría de ver cómo los jóvenes descubren canciones hechas antes de que nacieran y hoy las asumen como si fueran nuevas.

Su romance mayor ha sido con la guitarra, a la que considera “un arma peligrosa, de doble filo… es un universo infinito por descubrir y cada canción es un mundo: tiene que tener su arquitectura y su balance. El texto no es más importante que la música, hay que buscar incesantemente las posibilidades de la guitarra, que no tiene fin”.

Entre el 70 y el 80 del pasado siglo apenas se grabó la música de Marta Valdés. Por fortuna hemos recuperado a esa gran compositora de Cuba, la muchachita de escuela de monjas que empezó a escribir boleros sin saber una sola nota. Esa muchacha que intuyó cambios en nuestra música con el sentimiento del filin y antes de cumplir los 20 hizo “Con tus palabras”.

Con talento desbordante Marta Valdés, Premio Nacional de Música 2007, aprovechó la ruta que había conquistado el filin para caminar sobre un terreno nuevo, imposible de predecir. Con 88 años Marta Valdés anda sobre nuestra música, mirando más allá de sí misma, en busca de nuevos caminos nuevas canciones.