La primera parte de la jornada inicial del 61. Festival de la Trova Pepe Sánchez, acontecida en la mañana y la tarde de este sábado, constituyó un lujo para los participantes y para la ciudad de Santiago de Cuba.
Esta urbe, declarada por la Unesco en noviembre de 2021 como Ciudad Creativa en la Música, se enalteció pues hasta ese santuario musical que es la Casa de la Trova Pepe Sánchez, asistieron figuras de la talla de los maestros José María Vitier y Pancho Amat, acompañados por el entrañable trovador Eduardo Sosa, presidente del festejo.
Precisamente, a Pancho Amat y a su obra musical, y a los 60 años de haberse declarado el 19 de marzo (fecha del natalicio del sastre y trovador José “Pepe” Sánchez) como Día del Trovador cubano, está dedicada la fiesta.
Y para esas personalidades que tanto prestigian el pentagrama cubano, también fue un lujo asistir a un local modesto, sencillo, y al mismo tiempo grandioso, como es la también llamada “catedral de la trova” o si se quiere, el refugio de todos los trovadores y cantores, nacionales, y de los que llegan aquí, desde allende los mares.
La historia de la música… de la más cubana y auténtica música, jamás se podrá escribir sin reservar un sitio especial para la ʺPepe Sánchez” de la calle Heredia, en el centro histórico de Santiago de Cuba.
Y es que casi todo lo que en esta localidad se vincula con las cinco líneas y los cuatro espacios, de alguna manera tiene que reverenciar al lugar donde casi nacieron y se hicieron verdaderos “monstruos” del canto y la guitarra tradicionales.
Por eso Víctor Jara vino a esta ciudad y presuroso llegó y cantó en la Casa de la Trova santiaguera, y Paul McCartney –el único Beatle que ha estado en Cuba– aunque no cantó, al menos ocupó su taburete en la “Pepe Sánchez” y siguió con palmadas, y también con las claves, el ritmo de “Moneda Nacional” que amenizaba la mañana.
En ese ambiente fantástico se desarrolló el encuentro de varias generaciones de los más arraigados cultores de la música tradicional, en uno de los escenarios más tradicionales y con la voz y la guitarra del trovador Gaspar Hernández, del catálogo de excelencia de la Empresa de la Música y los Espectáculos, quien interpretó ʺTristezasʺ, de Pepe Sánchez, y ʺTrova a Pepe Sánchezʺ, de José Luis Lozada.
Este Festival está consagrado, además, a los 35 años de la creación del Instituto Cubano de la Música, y a las efemérides de trovadores y agrupaciones santiagueros y visitantes.
La ocasión sirvió para que el proyecto Nuestro Santiago, ciudad cultural, dirigido por los coordinadores Fausto Lázaro Moreno Montoya y Virgen María Castro Cobas, y con el trabajo de los alumnos de la escuela primaria Nguyen Van Troi, entregara una maqueta de la Casa de la Trova.
Luego, en el teatro de la Biblioteca Elvira Cape y después de las interpretaciones de Vocal Divas, se desarrolló el espacio teórico Lino Betancourt, dirigido por Yorisel Andino.
El momento reservó la interesantísima conferencia magistral del arquitecto Omar López, titulada “SonEros, una alternativa para el desarrollo local. Un Centro de Interpretación de la música cubana y caribeña: Monte Sonoro”, quien abundó sobre la importancia del disco de vinilo en la música cubana y la permanencia y actualización de ese soporte, aparentemente olvidado.
Al mediodía, en La Trovita de Castillo, en la calle Aguilera 888, un panel abordó la trayectoria de “Moneda Nacional”, en ocasión de los 25 de la agrupación, y la impronta de Gustavo Revé Sigler, su director, recientemente fallecido.
Por la tarde, la Casa Dranguet sirvió para la intervención “Vinilos de trova y café”, un conversatorio ilustrado a cargo de la Dra. Yaumara López y la Lic. Lianet Godínez, con Yorisel Andino como moderadora.
También, el programa vespertino de esta primera parte de la jornada inicial del Festival, incluyó el panel Del libro a la música. La promoción de la canción trovadoresca desde sellos editoriales en Santiago de Cuba, con la intervención de Gretchen Menéndez, directora del Centro del Libro y la Literatura.
Así, todo quedó listo para la segunda parte del primer día del “Pepe Sánchez”, por la noche en el Parque Céspedes.
Fuente: Sierra Maestra
