Si llegara a besarte como he soñado
Ha de ser imposible que tú me olvides…
¡Cuántos enamorados alrededor del mundo, con la complicidad de esta canción, se declararon su pasión! Famosos intérpretes de varios países la incorporaron a sus discos como una carta de triunfo segura. Pero quién fue el compositor que logró vencer el tiempo y las nuevas tendencias musicales con esta joya del pentagrama internacional.
El músico cubano Luis Casas Romero es el creador de este himno al amor; genio versátil que también compuso himnos patrióticos, desbordantes de ardor revolucionario, entre ellos El mambí, cantada hasta hoy por todas las generaciones de cubanos.
Nació el 24 de mayo de 1882, en Camagüey y falleció en la Habana el 30 de octubre de 1950, dejando un legado invaluable a la cultura cubana, el más memorable la primera transmisión y la fundación de la radio en Cuba, cuando en 1922 inauguró la 2LC; hecho que recordamos con agradecimiento sus herederos; los radialistas.
Hijo de humildes tabacaleros logró triunfar desde muy joven como flautista, compositor, director de orquesta y bandas militares. A él se debe Fue un compositor versátil que cultivó casi todos los géneros musicales: serenatas, danzones, marchas militares, guajiras, y valses. El teatro le agradece más de veintitrés zarzuelas, además de revistas musicales y operetas.
Es el padre de una de las formas autóctonas de la música cubana: la criolla; más movida que la clave, de melodía graciosa y sincopada. Algunas de las más recordadas son Carmela, Hortensia y Lola, todas compuestas en 1910.
Luis Casas Romero figura además entre los grandes innovadores, en 1918, fundó la primera fábrica electromecánica de rollos de pianola; con una técnica más avanzada que denominó rollo autógrafo; tal fue su éxito que la casa norteamericana QRS le entregaba sus matrices. Muchos compositores prestigiosos colaboraron con él: Ernesto Lecuona, Jaime Prats, Moisés Simons, Nilo Menéndez y Vicente Lanz.
Cuántos de sus triunfos, creaciones, méritos como músico y ser humano se deben postergar por la brevedad de este artículo, pero uno es inaplazable, a los 15 años de edad se enroló como mambí en el Ejército Libertador; dispuesto a dar la vida por la libertad de Cuba.
