Santa Haydee de América

Haydee Santamaria

Tu nombre es Haydee. Y acaso puede ser guerrillera, modestia, poesía de toda la luz, canto vital de América.

¿Puede alguien olvidarte? ¿Quién se atreve a convertirte en historia, si eres fuego eterno? ¿De qué estrella viniste a completar la aurora?

Campesina, compañera de todos los días. Hija de un hogar bendecido por la decencia y el amor. Sabia, con la rara mezcla de unos ojos curiosos y el espíritu noble.

Martiana, fidelista, humana. Hermana de la juventud más tierna, más derecha, más brillante. Más cubana.

Una centuria de camino llevas. De andar infatigable por lomas, llanos, plazas, oficinas, páramos. Las minas, los volcanes, los surcos y los libros no te dejan ir. No admiten que te vayas. Aunque hayas decidido que te busquen en otra dimensión, tu aroma nace en cada flor silvestre junto a un viejo arroyuelo.