Raúl Isidrón: La radio es mi primer y gran amor

Raul Isidron

El locutor Raúl Isidrón, del espacio televisivo Buenos Días, se autoreconoce como un hombre de radio, si bien trabaja en la Televisión Cubana.

Sus inicios y buena parte de su desarrollo profesional fueron en la radio de Cienfuegos, su ciudad natal y está aparejada a la tradición familiar, pues pertenece a la casta del excelente decimista Chano Isidrón, recordado por su programa Dímelo cantando, de la emisora Radio Lavín.

Comenzó en espacios infantiles en la emisora Radio Ciudad del Mar, pero por compromisos estudiantiles no continuó, hasta 1996 en que una nueva oportunidad se abrió para el también periodista:

Conversé con el comentarista Digno Rodríguez sobre mi interés por la locución. En ese momento no había escuelas de la especialidad en la Perla del Sur, no obstante, me hizo algunas pruebas de dicción y conocimiento general que me permitieron enrumbar mis primeros pasos en el mundo radial, como corresponsal deportivo.

Raúl afirma que entró a la radio con buen pie:

Acabadito de entrar matriculé un curso de locución, ello me dio la posibilidad de superarme y comenzar a hacer programas juveniles, hasta llegar a los informativos: noticieros y otros espacios. Hice programas variados, musicales, e infantiles, con algunos obtuve premios.

El paso por la radio fue un eslabón superior en su desarrollo profesional. Sobre este medio aseguró que:

Es mi primer y gran amor, aunque esté alejado de ella por diferentes motivos, respeto mucho a los radialistas, sé de sus sacrificios en pos de llevar un producto con calidad a los oyentes. Es un medio muy apegado a las familias, presente en todo momento, aun cuando se realizan las tareas hogareñas, lo que la convierte en una herramienta muy eficaz y oportuna.

 A pesar de ser un enamorado de la radio trabaja en la televisión, acerca de su tránsito a la pequeña pantalla expresó:

En el año 1999 comenzó un curso de captación y habilitación para la tele en Cienfuegos y doce meses después se implementó el sistema en el territorio. Al poseer buenos resultados en la radio, no me fue difícil entrar a Perla Visión, como periodista y narrador deportivo, aunque alternaba con la radio. En el telecentro me mantuve cinco años, gané varios eventos nacionales y me destaqué en el quehacer cotidiano, desde mi punto de vista lo más importante para cualquier comunicador.

Desde hace varios años los televidentes disfrutamos tu presencia en la televisión nacional. ¿Cuándo y cómo llegas?

Fue en 2005, vine como jefe de información de la parte deportiva. Allí estuve dos años hasta que cumplido el cometido pasé a los informativos. A la Revista de la Mañana, hoy Buenos Días, me integré en 2007. Siempre me sentí atraído por el espacio, por la relación con los públicos que desde ahí estableces, la manera de informar, la postura; por tanto, acepté la propuesta y ahí me mantengo. El 28 de septiembre cumplo 15 años junto a ese colectivo, a pesar de constituir un reto, porque es entrar a los estudios con la almohada casi pegada todavía a la cabeza… pero nada, asumes el desempeño, con niveles de tensiones que asimilas y vences por costumbre. La revista Buenos Días es un programa en vivo con todos los peligros de un espacio de ese tipo, muy dinámico, con emisiones que pueden resultar listas para salir al aire o que se complican en cualquier momento. En los últimos tiempos hemos tenido temas en el país que exigen cambios a la hora de salir al aire y se impone responder a esa impronta, pues de no hacerlo la gente deja de recibir el producto actualizado.

Raúl Isidrón es licenciado en Cultura Física y Periodismo, carreras que se complementan en su desempeño laboral. Admira la sencillez como una de las mayores riquezas del ser humano y en lo relacionado con la locución detesta las frases altisonantes y las voces engoladas. Le gusta ser en la televisión la misma persona que camina por las calles, que asiste a un teatro o hace una cola, «eso sí, frente a las cámaras con el justo respeto a la política editorial y a los televidentes, mi mayor razón de ser».