La sonrisa de Rita

Rita del Prado en concierto

«Todas las personas grandes han sido niños antes. (Pero pocas lo recuerdan)». Es muy conocida la frase de Antoine de Saint-Exupéry. Pero su verdadero alcance y significado no se percibe en su justa magnitud hasta que uno no vive una experiencia, como la de este miércoles 10 de agosto.

En la jornada de marras, el programa Estamos Contigo, trasmitió un concierto de la conocida cantautora Rita del Prado, que nos hizo regresar a esa etapa candorosa que se llama infancia y que no es más que un separador de la época en que soñábamos y reíamos a raudales y la que nos hundimos en un piélago de preocupaciones y ocupaciones, para convertirnos en seres algo huraños e intolerantes.

Si algo marca a Rita del Prado como un talismán de la alegría es ser una persona sonriente. Con su personalidad y con su música irradia un halo cordial, que nos baña, y  aleja —al menos por el momento— las rudezas, los sinsabores y los tropiezos

Autora e intérprete de innumerables canciones para todas las edades, es reconocida fundamentalmente por su música dirigida al público infantil. Pero con sus artes de pedagoga y psicóloga, hace que los adultos también nos sintamos arropados por las alas de sus canciones,

Pruebas de esta magia que la singulariza fueron los temas que interpretó: ʺLos trigales del Quijoteʺ, ʺMultitud de Chamaquileʺ, ʺEl mar y nosotrosʺ, ʺCanción de casi lo digoʺ, ʺRaspadura y Panetelaʺ, todos de su autoría, y ʺPolimita y Chivoʺ, escrita en colaboración con el dúo Karma.

En este festín de sonidos y colores, Rita tuvo como invitados a Enid Rosales y su grupo y al Coro Alegretto, dirigido por la maestra Maribel Nodarse.

La sonrisa contagiosa y las amables canciones de Rita del Prado demostraron de manera reiterada que la música es un bálsamo para espantar mohines y desalientos.