Los sonidos de la percusión llaman a celebrar y los vecinos de Guanabacoa acuden a compartir sueños y realidades. Es noviembre y siempre vuelve Wemilere, agasajo a los ancestros, ahora del 10 al 17 en su edición 29.
Esta vez el certamen Donde las raíces hablan se dedica al Aniversario 504 de la fundación de La Villa de San Cristóbal de La Habana, a la hermana República del Congo Brazzaville, a los 70 años de la fundación del Coro Folklórico Nacional, a la vida y obra de Lázaro Ross y su grupo Olorum y a Mario Angarica Díaz, conocido como Papo Angarica.
Los niños y adultos cantan y bailan lo aprendido de lo Yorubá, Congo y Abakuá, mientras los orishas reciben odas alegóricas en barrios de la antigua villa, se inauguran el Salón “Lo Africano” en la Galería de Arte “Concha Ferrant” y el coloquio Presencia en el Museo Municipal.
Encuentros de escritores, exposición de objetos de la República del Congo Brazzaville, presentación de libros sobre temas de las religiones afrocubanas centran la atención de los vecinos, de los investigadores y de diversas personalidades que disfrutan del jolgorio.
Artistas renombrados, aficionados de la casa de cultura municipal, promotores locales, junto a las autoridades del territorio y al pueblo están de fiesta para no dejar morir las tradiciones que nos hacen únicos.
Respeto por lo nuestro, alegría de vivir y música para disfrutar son la clave para Wemilere, celebración que Guanabacoa brinda cada noviembre y todos agradecemos.
Los sonidos de la percusión llaman a celebrar y los vecinos de Guanabacoa acuden a compartir sueños y realidades. Es noviembre y siempre vuelve Wemilere, agasajo a los ancestros, ahora del 10 al 17 en su edición 29.
Esta vez el certamen Donde las raíces hablan se dedica al Aniversario 504 de la fundación de La Villa de San Cristóbal de La Habana, a la hermana República del Congo Brazzaville, a los 70 años de la fundación del Coro Folklórico Nacional, a la vida y obra de Lázaro Ross y su grupo Olorum y a Mario Angarica Díaz, conocido como Papo Angarica.
Los niños y adultos cantan y bailan lo aprendido de lo Yorubá, Congo y Abakuá, mientras los orishas reciben odas alegóricas en barrios de la antigua villa, se inauguran el Salón “Lo Africano” en la Galería de Arte “Concha Ferrant” y el coloquio Presencia en el Museo Municipal.
Encuentros de escritores, exposición de objetos de la República del Congo Brazzaville, presentación de libros sobre temas de las religiones afrocubanas centran la atención de los vecinos, de los investigadores y de diversas personalidades que disfrutan del jolgorio.
Artistas renombrados, aficionados de la casa de cultura municipal, promotores locales, junto a las autoridades del territorio y al pueblo están de fiesta para no dejar morir las tradiciones que nos hacen únicos.
Respeto por lo nuestro, alegría de vivir y música para disfrutar son la clave para Wemilere, celebración que Guanabacoa brinda cada noviembre y todos agradecemos.
