Carlos Embale, de voz aguda y de amplio registro, dominó la interpretación de diversos géneros bailables de la música cubana y antillana.
Nace en La Habana el 3 de agosto de 1923, en el barrio de Jesús María. A finales de 1930, debuta en el mundo del espectáculo con su presentación en La corte suprema del arte. La aceptación ganada en este popular programa de radio para aficionados, lo colocó inmediatamente como un cotizado intérprete de las orquestas y conjuntos de moda en la época.
Fue vocalista del Sexteto Boloña y la Orquesta Melodías del 40, conjunto que acompañara también al pintoresco Trespatines. Fue parte integral del Conjunto Matamoros de Miguel Matamoros y en los años 1970 entró a formar parte del legendario Septeto Nacional de Ignacio Piñeiro.
Colaboró con Benny Moré, Compay Segundo y con el conjunto de rumbas de Alberto Zayas, El melodioso.
Se destaca con sus interpretaciones de música sacra de raíces negras (yoruba y abakuá), así como por su capacidad única para la interpretación de la rumba.
Falleció en La Habana, el 12 de marzo de 1997.
Con información tomada de la Ecured
