Casi finalizando el año un brillo especial motiva al ensamble Nova Corda a tomar nuevamente los escenarios para regalar una noche de sonoridades únicas. El próximo sábado 13 de diciembre, a las 6:00 p.m., la majestuosa Iglesia San Francisco de Asís, situada en Calle Cuba y Amargura, La Habana Vieja, abrirá sus puertas para un concierto que fusiona tradición, virtuosismo y espíritu festivo.
Nova Corda, fundado en 2018 y dirigido por el maestro Alejandro Coira Díaz, director de la cátedra de guitarra del conservatorio de música elemental Alejandro García Caturla, es hoy uno de los proyectos más singulares y prometedores dentro del panorama musical cubano. Integrado por jóvenes guitarristas formados en la enseñanza artística nacional, el ensamble ha desarrollado una línea estética que reinventa la guitarra clásica al convertirla en una voz colectiva.
El principal sello de la agrupación integrada en su mayoría por discípulos de la citada escuela, ubicada en el habanero municipio de Marianao, es la adaptación de repertorios concebidos originalmente para orquesta —Mozart, Bach, Tchaikovsky y otros grandes maestros— llevándolos con audacia al formato de guitarras múltiples, sin perder profundidad ni fuerza expresiva.
En este concierto especial, Nova Corda presentará un programa que combina obras orquestales emblemáticas con una selección de villancicos cuidadosamente arreglados para el ensamble, logrando un equilibrio entre lo solemne y lo íntimo, lo tradicional y lo innovador.
La calidez tímbrica de las guitarras, sumada a la acústica privilegiada de la instalación, promete una experiencia sonora que envolverá al público en un ambiente espiritual y festivo.
A lo largo de sus siete años de trabajo, Nova Corda ha crecido sostenidamente, consolidándose como un referente en la exploración creativa del instrumento. Su presencia en salas de prestigio y su constante renovación artística los han convertido en un símbolo de la nueva generación de músicos cubanos comprometidos con la excelencia.
Este 13 de diciembre, la música resonará entre arcadas y vitrales para celebrar el arte. Una cita imprescindible para quienes buscan emoción, belleza y un acercamiento distinto a la música de concierto.
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