Guido López Gavilán: 30 años de la Orquesta Música Eterna

Guido-Lopez-Gavilan

La Orquesta Música Eterna, bajo la dirección del Premio Nacional de Música, Guido López-Gavilán, celebra 30 años de labor artística continua. Este prestigioso conjunto ha recibido múltiples reconocimientos, entre ellos un Gran Premio Cubadisco. Además, ha participado en giras internacionales y se presenta regularmente en las principales salas de música del país.

Desde su fundación, la orquesta ha estado integrada por jóvenes instrumentistas, pues uno de sus objetivos fundamentales es contribuir a la formación de nuevas generaciones, además de difundir la música de cámara, y en particular, la música cubana.

Un año para festejar

Durante el 2025, la orquesta se ha presentado, con un variado repertorio, en espacios emblemáticos como la Basílica Menor del Convento de San Francisco de Asís, la Sala Cervantes, la Fábrica de Arte Cubano y la Casa del Alba Cultural.

En este último espacio, la obra fundamental fue “La Chacona para violín solo”, de Johann Sebastián Bach, reinterpretada en una nueva versión para orquesta de cuerda que resulta majestuosa, al evocar el sonido del órgano, destacó el maestro López-Gavilán.

Mientras que en la Sala Cervantes, contaron con la participación especial del Coro Nacional de Cuba y del Coro Entre Voces, lo que aportó una emotividad y belleza extraordinarias a la interpretación.

El maestro López-Gavilán recordó que, precisamente, la primera obra que interpretó la Orquesta de Cámara Música Eterna, en su concierto inaugural hace 30 años fue “Las Estaciones”, de Vivaldi. En aquella ocasión, –dijo– el solista fue el destacado violinista Alfredo Muñoz, fallecido recientemente, una figura emblemática en la enseñanza y ejecución del violín y la música de cámara en Cuba. Es una de las obras más conocidas y ejecutadas en todo el mundo debido a su riqueza tanto desde el punto de vista musical como también desde el punto de vista descriptivo, lo que la convierte en una pieza encantadora y única”, advirtió el Premio Nacional de Música.

Como parte de los festejos por las tres décadas de la agrupación, el pasado 10 de mayo, se realizó el concierto Cuatro Estaciones, en la sala teatro de la Biblioteca Nacional de Cuba “José Martí”. Una novedad fue la interpretación del joven laudista cubano Eduardo Corcho Torres quien presentó, por vez primera, un arreglo para laúd de las Cuatro Estaciones, de Antonio Vivaldi.

Más sobre el programa de celebraciones

En exclusiva para la web de Cadena Habana, el maestro López-Gavilán adelantó detalles sobre las futuras acciones del programa conmemorativo: «Tenemos previsto actuar en otras sedes, como la Casa de las Américas, donde se realizará la actividad de celebración principal, en el mes de noviembre, justamente cuando se cumple 30 años del concierto de Las Estaciones, protagonizado por Muñoz. Nos hemos propuesto colaborar con el grupo Vocal Luna, para el estreno de dos obras dedicadas genéricamente a Claude Debussy, que se titulan “Cantos de Sirenas” y “Sueños de Sirenas”, para coro femenino y orquesta de cuerda, que evocan la composición “Sirenas”, de Debussy».

El Maestro anunció que estas piezas serán el núcleo central de la celebración, aunque espera contar con la participación de más invitados, pero prefiere no adelantar nada más para no generar falsas expectativas.

«Vamos a continuar el homenaje a los 30 años de la orquesta, con distintas combinaciones de invitados. Seguiremos trabajando siempre en la música para contribuir a la existencia y bienestar de las personas que nos rodean», sentenció.

La docencia en su máxima expresión

El Maestro también abordó su estrecha relación con el sistema de enseñanza artística: «Mantengo un vínculo muy cercano y significativo con la enseñanza musical. Durante más de veinte años, trabajé con la Orquesta Sinfónica Juvenil del Conservatorio Amadeo Roldán y en ese tiempo han pasado por mis manos muchas generaciones de músicos cubanos». Fue allí donde se forjaron sus hábitos de tocar en orquestas.

Agregó que con esa formación orquestal se llegó a tener un alto nivel profesional al abordar obras de gran complejidad, desde la Novena Sinfonía de Beethoven de la cual «hicimos el último movimiento con coros, solistas, orquesta, hasta el repertorio de grandes compositores universales como Richard Wagner, Maurice Ravel, Sergei Rachmaninoff, Sergei Prokofiev e Igor Stravinsky».

En ese período de su trayectoria docente tuvo como asistente a la hoy maestra Daiana García quien fue su alumna en la Universidad de las Artes (ISA), y ha desarrollado una brillante carrera como directora de la Orquesta de Cámara de La Habana.

Además, como profesor de Dirección Orquestal en el ISA «he tenido bajo mi mando a excelentes directores quienes han asumido importantes roles en la Orquesta Sinfónica Nacional (OSN), como Iván del Prado o Enrique Pérez Mesa. También formé a Dalia Abreu, quien asumió la dirección del Orfeón Santiago tras la muerte de Electo Silva, y ha colaborado con la Orquesta de Santiago de Cuba».

Entre sus alumnos más brillantes se encuentra Marcia Quesada, quien se ha destacado tanto en sus estudios como en su labor al frente de la orquesta del Amador Roldán.  Recientemente fue nombrada directora titular de la Banda Nacional de Conciertos, tras el ascenso de Igor Corcuera a director de la OSN.

«Me siento muy orgulloso de contribuir al desarrollo de la música sinfónica en Cuba desde mi perspectiva personal y profesional, tanto con mi trabajo directo, como a través de mis alumnos, quienes continúan proyectándose en el tiempo, conformando un nuevo relevo y proyecto renovado de dirección orquestal», concluyó López-Gavilán.

Foto: Tomada de Internet

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