Quienes habitamos esta geografía conocemos el sabor de la libertad plena. Hoy nos mueven miles de razones para continuar con la adarga al brazo haciendo Revolución, y en ese hacer, el hombre absuelto por la historia, nos acompaña.
Porque Fidel vive en ese sitio imborrable, en la víscera noble de su isla, porque construyó sueños, porque el guerrillero de la Sierra se convirtió en leyenda por su grandeza y humanismo y en el maestro que nos enseñó a cuidar La Revolución.
Fidel se volvió el invicto líder de tantas batallas, visionario, íntegro, fiel. Fidel habita en toda Cuba, su presencia eterna nos ilumina y convoca desde cada sitio histórico donde estuvo y desde toda la Patria, porque Fidel es un país. Su ejemplo y legado iluminan nuestro destino.
Hoy su recuerdo eterno nos impulsa porque su propio corazón el único que tuvo lo desplegó en el aire como una gran bandera/ como un fuego encendido contra la noche oscura.
El cambió la historia de Cuba, Fidel hizo realidad todos los sueños de José Martí, y convirtió la utopía en certezas y esperanzas. Hoy habitas Comandante eterno, urgente, necesario en el lado izquierdo del pecho de tu pueblo, que te sabe de memoria y repite Patria o Muerte, Venceremos.
