Denifer, sin límites para la música

Denifer Hernández Cuesta

La música llega a una niña y, cual hada madrina, revierte en bienestar su historia de silencios. A Denifer Hernández Cuesta, muchacha autista de Guanabacoa, la salvó para siempre su paso por el proyecto Granjita Feliz y, después, conocer a la instructora Clara Elsa Mirabal Abed.

Dihanis Cuesta Mena recuerda cómo la vida le jugó mal con su única hijita. Sin embargo, enfrentó con valentía cada tristeza e incertidumbre. No desesperó. Buscó donde amor y ciencia tendieran manos. Luego de trastornos conductuales de la bebé, halló especialistas certeros en diagnóstico y tratamiento de rasgos del espectro autista, que abrieron senderos de esperanzas.

Ahora Denifer será la protagonista de un concierto este sábado 6, a las 5 de la tarde, en la galería de arte “Concha Ferrant”, de Guanabacoa.

Parece cosa de magia el tránsito entre más de una década de atención esmerada, búsqueda de motivaciones para que Denita no temiera a sus semejantes, y la adolescente que hace algo más de un año participa en espectáculos de música y teatro. Realmente solo la perseverancia de su mamá y demás familiares dieron luz a su existencia. Lo que no imaginaban era encontrar a la profesora Clara, de la Casa de Cultura de la antigua villa habanera.

La madre agradece. Clarita es ya de la familia. La discípula quiere ser cantante lírica como ella y hace progresos enormes. También la instructora de teatro de Guanabacoa, Alicia Marta González, la tomó como alumna y resulta tan increíble verla actuar, como escucharla cantar varios géneros en español e inglés, e, incluso, acompañarse al piano.

Denifer se vestirá de fiesta este sábado para esperar a todos en su concierto, donde cantará once temas y participarán otros niños. Ella siente el arte sonoro cual pasión interminable, mientras su profesora asegura que los límites de la muchacha para la música están en el infinito.

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